Donde caben 2 cabrán 3.

Parece que fue ayer cuando la pequeña Charlie llego a la Vila de la Universitat Autónoma de Barcelona.
Recuerda su emocionante entrada en el G206, la aparición de Vicky y, con ella, dos de sus mayores apoyos durante este tiempo en la ciudad condal.
Recuerda abrir la puerta de su piso a Iratxo, la primera de muchas personas en BCN, junto con Mire y Lemins, que le demostraron que las apariencias engañan y que, por muy diferente que alguien pueda ser a ti, éste puede convertirse en tu mejor confidente, compañero de llantos y risas y amigo.
Poco después, Sam, H, Bert, Erica, Laura y Carrei apareciereon en su vida, junto con los primeros exámenes de la universidad, los primeros jueves, UNANIMUN y una cantidad de anécdotas y grandes momentos en el bolsillo; y, más tarde, tuvo el placer de que Mo'nster, Martí, Romi, ME, etc. amenizaran su estancia día a día, clase a clase y fiesta a fiesta.
Para Charlie ya era todo un privilegio llevar la vida que llevaba, pero entonces, llegó Segundo, y todo lo inmejorable que había tenido lugar en 2010, mejoró en 2011.
El destino, el karma, Dios, la suerte o cualquier cosa en la que queráis creer, hizo que el B209 se cruzara en su camino. Y ahí, en el mismo instante en el que una chica rubia, de gafas y con cola de caballo abrió la puerta de su cuarto a la 1 de la tarde del día de la Mercé, ahí todo cambió.
Con MeryP llegaron las noches en vela hablando por hablar, llegó Lemins (cada noche), llegó ELSA, llegó el perrero nocturno, llegó la obsesión por las compras, llegó el pelo liso y el maquillaje, llegó Poznan, llegó una persona que entendía y respetaba a Charlie y, a la vez, sabía cómo controlarla, llegó, probablemente, una de las mejores amigas en el mundo y llegó, como en todo en la vida, el fin.
A dos días de marcharse, Charlie acaba de cerrar su última maleta y ha entrado con MeryP en su habitación. Ambas pensaban lo mismo, pero solo de la valiente boca de MP salió un "jo, que vacía está esta habitación..."
Parece que fue ayer, pero, en realidad, fue hace ya dos años y Charlie, como todo el mundo, ha cambiado.
Ya tiene un amigo gay, mejor dicho, unos cuantos.
Habla catalán fluído y cada día mejora su inglés.
Se arregla mas que antes, mejor dicho, se arregla.
Ha comenzado a pensar que, tal vez, y solo tal vez, el amor exista de alguna manera.
Ha aprendido a valorar lo que tiene y ha descubierto lo muy afortunada que es.
Ya sabe cocinar, o al menos, sobrevivir sin papá en la cocina.
Se siente más madura, y ha aprendido a sobrellevar los 20.
Comienza a disfrutar de la vida, por que ha descubierto que solo tenemos una y que, visto lo visto, el tiempo pasa volando.
Ha tenido la gran oportunidad de conocer a gente divertidamente diferente en todos los aspectos posibles y tuvo la suerte dde aprender de cada uno de ellos.
Y sabe, seguro, que se va, pero que, sin duda alguna, volverá.